* 4 millones de mexicanos, entre ellos 165 mil yucatecos, caen bajo la línea de la pobreza * El Gobierno del Estado refuerza el llamado a trabajar en equipo para la creación de más empleos y la atracción de inversiones * Coneval destaca el trabajo del Gobierno del Estado como el líder nacional en programas y acciones sociales para reducir efectos de la emergencia sanitaria y de cinco fenómenos meteorológicos.
Mérida, Yucatán, 5 de agosto de 2021.- Las afectaciones sociales y el impacto económico de la pandemia del Coronavirus afectaron duramente los ingresos de la sociedad mexicana, empujando a más de cuatro millones de compatriotas bajo la línea de la pobreza, de acuerdo con los resultados de la medición multidimensional de la pobreza para el año 2020, emitido por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
De acuerdo con los resultados emitidos hoy, en México existen más de 155 millones de personas en situación de pobreza, lo que significó un incremento de 2 puntos porcentuales, en comparación con el 2018.
Mientras tanto, en Yucatán, los datos presentados ratifican las primeras estimaciones del Gobierno del estado, realizadas en mayo de 2020, cuando se consideró que la contingencia sanitaria causada por COVID-19 generaría un incremento potencial de 163 mil pobres.
La medición de la pobreza se realizó del 21 de agosto al 28 de noviembre de 2020 a partir de la Encuesta Nacional de Ingreso-Gasto de los Hogares que levantó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), por lo que los resultados presentados el día de hoy reflejan el impacto, no sólo de la contingencia sanitaria, sino también los efectos de cinco fenómenos meteorológicos: las tormentas tropicales Amanda, Cristóbal, Gamma y los huracanes Delta y Zeta, que provocaron inundaciones y pérdidas millonarias de materiales no sólo en el campo, sino también en zonas urbanas.
De las seis carencias consideradas para la medición de pobreza multidimensional y reportadas por el Coneval, la entidad redujo el porcentaje de población en tres y registró incrementos en las otras restantes. Las tres carencias que incrementaron entre 2018 y 2020 fueron las de acceso a servicios de salud, que incrementó 10.7 puntos porcentuales para ubicarse en 24.7%; la de acceso a la alimentación nutritiva y de calidad que subió 3.3 puntos porcentuales y se colocó en 24.6%, y finalmente, el Rezago Educativo, que incrementó 0.3 puntos respecto de 2018 para colocarse en 21.8% en 2020.
De manera particular, las carencias que disminuyeron respecto de 2018 fueron las de acceso a la seguridad social, que disminuyó -0.4 puntos porcentuales para ubicarse en 49.4%; carencia por calidad y espacios de la vivienda que se redujo -1.6 puntos porcentuales para ubicarse en 12%, y carencia por servicios básicos en la vivienda que disminuyó -3.8 puntos porcentuales, para ubicarse en 34.6 por ciento.
Así, en la comparación nacional, el reporte registra que Yucatán se mantiene en el número 16 en cuanto al mayor número de pobres, misma posición que ocupó en 2018, a pesar de enfrentar el año más difícil de la historia moderna con la llegada de la pandemia y cinco fenómenos meteorológicos que causaron diversas afectaciones. Puesto en contexto, las 164,600 personas en condiciones de pobreza registradas en el estado significan el 2.1% del total nacional.
Ante ello, el Gobierno del Estado ha implementado una serie de programas y acciones en materia de empleo formal durante la contingencia sanitaria, al desarrollar 20 intervenciones públicas que contemplan el otorgamiento de créditos, subsidios al empleo e incentivos fiscales, por lo que el Coneval ha reconocido que Yucatán es la entidad del país con el mayor número de iniciativas impulsadas para contrarrestar los efectos de la pandemia.
Cabe recordar que en el pasado mes de julio se reportó que, durante los últimos 11 meses, de agosto de 2020 a junio de 2021, en Yucatán se han recuperado un total de 20,299 empleos. Este resultado fruto del trabajo coordinado entre gobierno, sociedad e iniciativa privada sienta las bases para seguir adelante en la reactivación y transformación de la economía yucateca.
Yucatán no pudo contar con una mayor inversión pública por el rechazo del Congreso local al plan de creación de empleos presentado por el Ejecutivo, el que hubiera evitado que miles de familias cayeran en la pobreza al ver desaparecido su empleo por las condiciones sanitarias.