Los migrantes sometidos al tráfico ilícito a través de la peligrosa región de Tapón del Darién en América Central son regularmente objeto de abuso, violencia y agresión sexual, siendo las mujeres y niñas las principales víctimas. Una iniciativa canadiense contribuye a formar a la policía para mejor detectar el delito.
Esta semana en Puntarenas, Costa Rica, expertos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), capacitaron a los funcionarios para identificar tales delitos y tomar medidas de protección y acciones legales apropiadas.
El evento es parte del proyecto STARSOM*, que tiene como objetivo fortalecer la respuesta de la justicia penal al tráfico ilícito de migrantes y proteger los derechos de los migrantes a través de las rutas que conducen a América del Norte.
“Los funcionarios que se ocupan de investigaciones complejas sobre el tráfico ilícito de migrantes deben ser capaces de reconocer los signos de abuso y violencia que están asociados con este delito, pero que a menudo se pasan por alto“, dice María Biela, Asesora Regional de STARSOM en Costa Rica.
“Los funcionarios que se ocupan de investigaciones complejas sobre el tráfico ilícito de migrantes deben ser capaces de reconocer los signos de abuso y violencia que están asociados con este delito, pero que a menudo se pasan por alto”, dice María Biela, asesora regional de STARSOM en Costa Rica.
Costa Rica es uno de los múltiples países transitados por migrantes de otras partes de América Latina y el Caribe, Asia, y África en su camino por intentar llegar a los Estados Unidos y Canadá.
UNODC/Jorge Carmona. Policías, investigadores, guardacostas y oficiales de control fronterizo, funcionarios de migración, así como fiscales de Costa Rica y Honduras, participaron en un simulacro de interceptación de un caso agravado de tráfico de migrantes,
Testimonios horribles
“Hemos escuchado testimonios sobre las formas más horribles de abuso que ocurren a lo largo de las rutas migratorias. Tortura, violación, violencia sexual, asesinato y abandono de mujeres embarazadas, niños y ancianos migrantes”, dice Biela.
En la capacitación participaron policías, investigadores, guardias de control fronterizo y costeros, funcionarios de migración, así como fiscales de Costa Rica y Honduras.
En el transcurso de cuatro días, los participantes adquirieron habilidades teóricas y prácticas sobre la detección, denuncia, investigación y enjuiciamiento de casos de tráfico ilícito de migrantes y abuso de migrantes, aprendiendo de estudios de casos reales en el Tapón del Darién.
“Parte de nuestra capacitación fue reconocer que al investigar un caso de tráfico ilícito de migrantes o entrevistar a un migrante, deben considerar los posibles delitos que se han cometido contra ellos”, dice el oficial de Prevención del Delito de la agencia de la ONU, Carlos Pérez.
Y añade: “Esto no es sólo una cuestión de derechos humanos. Si hay pruebas comprobadas de tráfico agravado, esto podría fortalecer el caso de la fiscalía y, si es declarado culpable, aumentar la sentencia del traficante”.
Un estudio de UNODC sobre el abuso y el tráfico ilícito de migrantes mostró que la violencia se utiliza como una forma de castigo, intimidación o coerción, o a menudo se inflige sin razón aparente.
UNODC/Jorge Carmona. Participantes durante un simulacro de interceptación de un caso agravado de tráfico de migrantes. Fueron capacitados en técnicas para detectar, denunciar e investigar casos de abuso y tráfico de migrantes.
Las mujeres vulnerables a los abusos sexuales
Las mujeres son vulnerables al abuso sexual y pueden ser violadas como forma de pago por su viaje, lo que puede conducir a embarazos no deseados y abortos o partos en malas condiciones higiénicas y médicas.
“Esto también puede ser una demostración de poder“, explica María Biela. “Cuando un traficante abusa de una mujer, está enviando un mensaje a las otras mujeres y hombres del grupo: ‘También te haré daño si no aceptas mis reglas'”.
Según la investigación de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, hay múltiples razones por las que los migrantes maltratados se abstengan de denunciar casos de abuso.
“El miedo juega un papel. Las personas que tienen un estatus irregular no tienen los documentos que les permiten permanecer legalmente en los países que atraviesan, por lo que desconfían de las autoridades. También puede haber barreras culturales y lingüísticas y la necesidad de continuar con el viaje o enfrentarse a ser dejado atrás por los traficantes”, dice Biela.
La experta internacional en tráfico ilícito de migrantes, que organizó el evento de esta semana, destacó la importancia del desarrollo de medidas que permitan a los migrantes denunciar casos de abuso durante su viaje.
“Necesitan tener acceso no solo a la atención médica, sino también a la justicia por el abuso al que han sido sometidos”, agrega.
UNODC/Jorge Carmona. Una de las participantes de un simulacro de interceptación de un caso agravado de tráfico de migrantes. Fueron capacitados en técnicas para detectar, denunciar e investigar casos de abuso y tráfico de migrantes.
Cooperación transnacional
Otro objetivo de la capacitación fue aumentar la cooperación entre las autoridades de Costa Rica y Honduras para prevenir el tráfico ilícito de migrantes, ayudar a las víctimas de abusos y llevar a cabo investigaciones conjuntas sobre las redes de tráfico ilícito de migrantes.
“Aprendí cómo la cooperación con las instituciones relevantes a nivel nacional e internacional es una herramienta poderosa que permite combatir este tipo de delitos cometidos contra los migrantes de manera más rápida y adecuada”, dice Wendy Gómez, analista de cooperación del Ministerio de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras.
La comisionada de Policía, Erika Madriz Chinchilla, directora de la Región de Puntarenas de Costa Rica, dice: “El conocimiento adquirido nos permitirá guiar a nuestros equipos, principalmente a los equipos de primera línea. Cuando las autoridades identifican los lugares donde se está llevando a cabo el tráfico ilícito de migrantes, es importante responder a los casos con el debido respeto a los derechos de los migrantes“.
*STARSOM es financiado por el Gobierno de Canadá a través de su Programa de Desarrollo de Capacidades contra el Crimen.
INFORMACIÓN TOMADA DEL PORTAL DE NOTICIAS ONU