Mafia Inmobiliaria dedicada a robar predios en la Riviera Maya, denuncia empresario

Con la complicidad del Poder Judicial y autoridades estatales lo despojaron de su predio y tras 13 años de lucha contra un fraude todavía no recibe justicia, pues hay una red de complicidades que lo frena

Playa del Carmen.- Más de una década lleva luchando contra un fraude inmobiliario, el empresario con doble nacionalidad, mexicana y francesa, Ian Fautsch Domínguez, a quien despojaron de su propiedad con la complicidad del Poder Judicial y demás autoridades de Quintana Roo.

Recordó que su padre Christian Fautsch Charpentier compró la propiedad de 2 mil 500 metros cuadrados con frente de playa ubicada en Playa del Secreto, ubicado a 10 kilómetros de Puerto Morelos, en 1989 y la escrituró en 1990. Un amigo le recomendó este terreno a su papá, y la tierra no era tan cara como ahora, hoy esa propiedad cuesta alrededor de 50 millones de pesos. En ese terreno construyeron la Villa Kaak Naab, dedicada a la actividad turística.

El empresario explicó que hace diez años la empresa fantasma Leoncio Constructores S.A de C.V supuestamente compró su propiedad y la inscribió en el Registro Público de la Propiedad, quitando incluso las hipotecas que había sobre el predio en ese momento.

Explicó que en el 2010 la citada empresa fantasma supuestamente compró el predio, y tiempo después se enteraron que es José Julio Asencio Reynoso, director del Instituto de la Vivienda en Quintana Roo en la administración de Mario Villanueva Madrid, quien falsificó la firma de su padre en una notaría de Mérida para tener un poder con el cual simuló una compraventa en la Notaria 27 de Playa del Carmen, y posteriormente inscriben la escritura apócrifa en el Registro Público de la Propiedad. Lo hacen en tres días quitando gravámenes de hipotecas que bloqueaban la compraventa.

Denunció que la mafia inmobiliaria está coludida o se genera incluso desde el Poder Judicial, donde Asencio Reynoso tiene allegados. Recordó que iniciaron el proceso por la vía penal sin lograr resultados, pues el procurador en esa época era Francisco Alor Quezada, compadre de Asenio Reynoso.

Y posteriormente se fueron por la vía civil 455/2014 con una demanda de nulidad de escritura en el Juzgado Civil de Playa del Carmen y aunque obran en los expedientes periciales de grafoscopía que señalan que la firma es falsa, y que su papá no estaba en México en la fecha en que supuestamente concedió un poder en la ciudad de Mérida, no hay justicia para ellos.

Dijo que está claro que hay una red de corrupción extremadamente arraigada y podrida en el Poder Judicial. Todos se manejan con impunidad, no tienen vergüenza, sus resoluciones no tienen ni pie ni cabeza y pueden actuar de esa manera porque nadie les hace nada.

Sostuvo que Asencio Reynoso tiene ahí un sobrino, Octavio Asencio Fernández, juez del Juzgado III Civil de Cancún, que ahora está en funciones de Secretario de Presidencia del Tribunal Superior de Justicia de Quintana Roo, y su esposa es Adriana Cárdenas, magistrada Penal. El empresario dijo que ellos y otros magistrados emiten sentencias a modo, y se dedican a eso, a robar predios.

Finalmente dijo, que él irá hasta las últimas consecuencias, pues ellos tienen todos los documentos que avalan su propiedad y la Villa se encontraba funcionando cuando los desalojaron en junio de 2019 sin previo aviso, ni notificación alguna del juicio reivindicatorio que se interpuso en su contra.

Dijo que cuando los desalojaron, la Villa estaba funcionando, pero los supuestos dueños demolieron todo por temor de que ellos recuperaran la propiedad. Desde hace 4 años la propiedad está abandonada.