Cultura
¿Colonizamos la Luna o mejoramos la Tierra?
La interrogante que formula el escritor literario “Fernando Viveros” al lector
“Somos” es una historia de amor a la Tierra y a la Luna. Los personajes gozan y sufren la disyuntiva entre buscar fuera del planeta la sobrevivencia humana colonizando la Luna o utilizar la imaginación, las palabras, los recursos y la acción para solucionar los problemas de la Tierra: el deterioro del planeta, los excesos en el uso de la tecnología, el hiperindividualismo y la pérdida de sentido en la vida.
¿Puede haber marcha atrás en el impulso humano de conquistar nuevos mundos? ¿Cómo hacerlo compatible con la esperanza de conservar la vida y el amor en la Tierra? Esta es una novela distópica que junta las puntas, cada vez más cortas, del fino hilo entre el presente y el futuro. Promueve, con excepcional claridad y lucidez, un debate actual y una línea editorial innovadora y de vanguardia en el contexto de las novelas de anticipación y de divulgación científica: el fortalecimiento del humanismo en la era digital y de colonización espacial.
Fernando Viveros
Nació en la ciudad de México (1960). Lector y viajero permanente. Doctor en creación literaria, promotor cultural, melómano y percusionista; Doctor en Derecho, diplomático, educador, maestro rural en África y en India; Dirigió diez años un periódico digital de divulgación sobre los usos sociales de las nuevas tecnologías. Ha publicado las novelas Candidez, The Light, Y seguiremos siendo nosotros, y Resistiremos: la amenaza hipermoderna.
Colonizamos la Luna o mejoramos la Tierra?
Fernando Viveros
Stella, una joven mujer con la perseverancia que da el dolor íntimo de la orfandad, de llegar a la Luna para encontrar a sus padres, su fantasía desde niña. Para ello, se capacita como astronauta y, después de constantes rechazos por ser mujer, logra ser contratada para tripular una nave de turismo espacial del empresario Elton Trust para que junto con el astronauta Lucio, lleve a la Luna a Joe Starr, su socio y nieto de un autoproclamado dueño de la superficie Lunar, de la que ha vendido millones de acciones y a Vera Canto, joven influencer y flautista tridimensional quien dará un concierto en la Luna. Transcurre el viaje de Stella entre el contraste de recuerdos, inseguridades y expectativas, la conmoción por observar la fragilidad de la Tierra y la percepción de unidad con el universo. Las habilidades como astronauta de Stella son puestas a prueba al sortear los impactos de desechos espaciales. El contexto del viaje es tenso ya que coincide con la decisión de los comandantes de los tres territorios, en los cuales está dividida la Tierra, el Gugul, el Baijing y el Yandexovich, de colonizar la Luna y repartirse los recursos que encuentren. En la Tierra existe el movimiento ecologista SOMOSAQUA y sus coordinadores, Bosco y su pareja Shui Xiang, deciden viajar a la Luna para protestar y concientizar a la población sobre las consecuencias de colonizarla. Stella pisa la Luna y, en medio de la tristeza de no encontrar a sus padres, se desmaya y tiene la alucinación del encuentro con su madre y su padre. Joe Starr logra poner banderas simbólicas y declararse propietario de la Luna en un mensaje que es transmitido en redes sociales en las que convoca a la colonización de la Luna como única forma de lograr la supervivencia de la raza humana. Como contraparte, Shui Xiang envía un mensaje ecologista desde la Luna exhortando a valorar la belleza de la Tierra y a defenderla de las situaciones que la amenazan. Los comandantes ordenan detener a Joe Starr quien decide suicidarse enfrente de Stella. Lucio y Vera le confían a Stella su decisión de quedarse en la colonización de la Luna y le exponen sus razones: él para encontrar sentido a su vida y ella para mantener, a través de las expresiones artísticas, la esencia del ser humano en la Luna. Stella conduce sola la nave de regreso a la Tierra con Bosco y Shui Xian, se entera de que está embarazada por lo que se lo comunica a Marino, su ex instructor de buceo y actual pareja. Una serie de recriminaciones entre los comandantes concluye en un ataque nuclear recíproco. En ese momento se contemplan desde el espacio los hongos de humo que genera el ataque nuclear, la atmósfera se encuentra radioactiva y Stella, en medio de los riesgos, tiene que tomar una decisión entre regresar a la Luna y salvar la vida o concluir el viaje.
